Personal y pacientes abandonaron las instalaciones del nosocomio Wuchang Fangcheng, construido en la ciudad de Wuhan Pese a la pesadilla
que se vive a nivel mundial por la pandemia de coronavirus (COVID-19), la ciudad de Wuhan en China, donde se originó el foco de infección, hoy mostró al mundo un panorama
más alentador tras celebrar el martes pasado el alta de todos sus pacientes del hospital temporal Wuchang Fangcheng. El recinto fue construido en solo 10 días con la intención de tratar
a las personas que presentaron síntomas relacionados con el COVID-19, quienes tras recibir su respectivo tratamiento pudieron ser dados de alta. Tanto pacientes como personal
del hospital abandonaron las instalaciones, sin antes realizar al exterior de éste una celebración con motivo de las vidas salvadas por la intervención médica temprana. El hospital
albergó instalaciones y material médico especializado para el tratamiento de la infección, cada uno de los pacientes contó con una camilla, y los pasillos estaban divididos por secciones, en las
que el equipo médico realizó sus respectivas labores hasta el día de hoy. Personal médico retiró sus objetos y tras la salida del último paciente las instalaciones del hospital Wuchang
Fangcheng fue desinfectado. Mientras tanto en China se ha informado que los casos de contagio han comenzado a reducir notoriamente. En tanto que en la ciudad de Wuhan,
algunas medidas de restricción han ido disminuyendo, se autorizó que las empresas de bienes y servicios de primera necesidad vuelvan a operar; sin embargo, se mantiene el trabajo desde casa, pero
se espera que pronto se retomen las actividades con normalidad