Las funerarias están desbordadas de trabajo y otras se niegan a seguir los procesos por temor a contagios La fulminante propagación del
coronavirus en la provincia de Guayas, cuya capital Guayaquil es una de las ciudades del mundo más castigadas por el coronavirus per cápita, ha creado una situación de abandono de cadáveres que
las autoridades tratan de resolver. Por lo anterior, el Gobierno de Lenín Moreno puso en marcha esta semana una Fuerza de Tarea Conjunta, y coordinar la recolección general de
cadáveres, y la fecha, militares han levantado al menos 150 cuerpos, de los cuales se desconoce cuántos murieron a causa de coronavirus. Para Jorge Wated, jefe de esa Fuerza, en estos momentos la
presencia de cadáveres en las viviendas “está relacionada con la poca capacidad que tienen las funerarias de la ciudad de dar sus servicios mortuorios en conexión con los camposantos de
Guayaquil”.
A las funerarias desbordadas de trabajo, se sumaron otras, generalmente pequeñas, que se niegan a seguir los procesos por temor a contagios
al desconocer la causa del fallecimiento. Y a esto, se sumó la dificultad que conlleva el toque de queda, por quince horas, a partir de las 14.00 hora local, en todo el país, que complica
los trámites de defunción, algo que intentan solucionar ahora con la extensión de ciertos horarios de trabajo.Por ello, con la nueva Fuerza de Tarea se busca facilitar la realización de trámites,
evitar que personas salgan a las calles y entregar los documentos en el hogar en caso de que la gente desee enterrar por cuenta propia a sus muertos, sin embargo, hay cuerpos que las familias han
preferido que sean retirados por las autoridades.
En la provincia ecuatoriana del Guayas el contagio de la COVID-19 es de los más altos del mundo si se tiene en cuenta el número de
población, se ha duplicado por la imposibilidad de enterrar a muchas personas que han fallecido en sus hogares, donde han permanecido durante días. Según cifras oficiales, en Ecuador hay 79
fallecidos por COVID-19, de los cuales 52 han muerto en Guayas, pero sospechan que otros 67 decesos puedan estar relacionados con esa enfermedad.